Es uno de los referentes en el mundo de la ópera. Aunque no pudo crear al personaje de Fígaro ya que, como es sabido, Mozart compuso "Las bodas de Fígaro", le dio otra perspectiva no menos impactante al personaje del barbero... pero manteniendo su capacidad de "enredar y desenredar" que ya tenía en la ópera mozartiana. El "barbero" es la primera de las obras de Pierre Caron de Beaumarchais y cuyas "Bodas" es la continuación con nuevos personajes pero manteniendo a ese Don Bartolo con ganas de venganza, a ese Don Basilio, a ese Conde tan mujeriego, a esa sufrida Rosina y, por supuesto a ese Fígaro, ya transformado en sirviente del Conde. Una obra imprescindible para entender la obra del salzburgués, ya que le dota de determinadas cualidades a los personajes, los perfila, aunque en la obra rossiniana, el Conde de Almaviva aparece más agradable que en la mozartiana. "Il barbiere di Siviglia" es una ópera que difícilmente defrauda a los que empiezan. Fragmentos como la obertura, ampliamente reconocida en medios ajenos a la ópera, la célebre aparición de Fígaro con ese "tralallera", el aria de Rossina "Una voce poco fa", etc  son algunos de los más bellos e impactantes de la obra.

Dirección musical: Antoni Ros Marbà.

Dirección escénica: Curro Carreres.

Escenografía: Sergio Loro.

Vestuario: Gabriela Salaverri.

Iluminación: Baltasar Patiño.

Coreografía: Antonio Perea.

Coro: Capela Compostelana.
Intérpretes: Damiano Salerno, Alessandra Volpe, Juan Antonio Sanabria, Paolo Bordogna, Simón Orfila, Leticia Rodríguez, Axier Sánchez.